Agradecer es algo que normalmente no tenemos como un hábito de vida. Estudios realizados por profesionales de la Psicología Positiva han demostrado el poder del agradecimiento en el bienestar y estados emocionales positivos.
Alguno de los estudios consistió en separar dos grupos de personas. A un grupo se le pidió que hicieran su diario de agradecimiento por tres meses y el segundo grupo que era de control, seguir haciendo su rutina habitual. Al terminar el período, los psicólogos hicieron varias pruebas de estado anímico y el grupo que realizó el diario de agradecimiento se sentía más tranquilo y con más optimismo que el grupo control que no realizó el diario.
Pasos para hacer tu propio diario:
- Busca una libreta que te guste y colócala en alguna mesita al lado de la cama con una pluma para escribir.
- En la tarde o antes de dormir coloca tres cosas que agradeces ese día.
- Puedes agradecer desde un evento importante del día, hasta lo más pequeño; por ejemplo: el agua que tomas, el sol que calentó e iluminó tu día, la montaña o paisaje, la sonrisa que alguien te regaló, el abrazo que te dio tu hijo cuando llegó de la escuela o de tu esposo antes de dormir.
- Si un día se te pasa escribir, no te agobies, puedes durante el día siguiente poner atención y percibir las cosas maravillosas a las que puedes agradecer ese día y luego escribirlas en la noche.
Un tip importante: si tienes un día complicado, agotador y quedas con poco ánimo, ese día revisa todo lo que has escrito, estoy segura de que te ayudará a terminar el día con más tranquilidad. Buscar estos detalles pueden cambiar tu forma de percibir algunos problemas y entender que hay más que agradecer de lo que piensas.
Te invito a que comiences tu diario de agradecimiento como una herramienta muy poderosa.
¡Hay mucho que agradecer que no nos damos cuenta!
Moni Lenz
Health Coach
Health4life / TecSalud